Escrito por Fabián Gómez
Con la manipulación de las instituciones, Enrique Peña Nieto tratará a cualquier costo de hacer ganar a los candidatos de su partido en las elecciones del 2017 y 2018.
Se equivocan quienes creen que Peña Nieto es un personaje cualquiera.
Una cosa es que sea torpe, ignorante e inculto y otra que no sepa ejercer el poder.
Lo ejerce como un verdadero tirano y dictador disfrazado de demócrata.
La semana pasada, el INE prohibió al gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, realizar actividades propias de su investidura y revelar sus cualidades personales.
Por supuesto, quien aprobó tal aberración es Peña Nieto, quien montó en cólera cuando se enteró de las aspiraciones presidenciales del mandatario poblano dadas a conocer en una televisora a nivel nacional.
Peña Nieto sabe que el gobernador poblano será presidente de México si gana la candidatura del PAN , de ahí su extrema preocupación porque sabe que son reales las posibilidades de entregar la Presidencia de México.
Por eso sus actitudes de Gran Tirano.
Por eso usa y manipula a las instituciones.
Por eso su desesperación.
Lo cierto es que la ignorancia de Peña Nieto lo lleva a perder la frialdad y el temple que deben caracterizar a los políticos.
Y es tal su locura que semeja a los dictadores que se roban las elecciones antes de que se lleven a cabo.
El personaje de los memes, del que todos se burlan, de las caricaturas, el que está reprobado ante la opinión pública, resultó ser un dictador moderno dispuesto a derramar incluso sangre para el que su corrupto partido y gobierno repitan en el 2018.
Por eso la decisión del INE que busca a cualquier precio bloquear las aspiraciones del mandatario poblano que ha sido venerado por TODOS los funcionarios peñistas.
Por eso la obsesiva decisión de Peña Nieto de impedir y descalificar a sus contrincantes con posibilidades reales.
Para comentarios, aclaraciones y filtraciones:
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@fabiangomezh
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