Por Carlos Baez .
No es para nadie un secreto que él sicariato hace un tiempo llego a nuestro país y vino para quedarse. Se acaba de caer vía el Tribunal Constitucional una de las muchas leyes que modificaba el viejo código penal donde le daban 40 años de prisión a las personas que juzgadas por este tipo de delito salieran condenadas. Pero no importa si las penas se aumenten, si nuestro sistema judicial muy difícilmente tiene un régimen de consecuencia contra nadie. Ya en estos días hemos visto como cada vez más este poder luce más deteriorado, y menos eficiente para enfrentarse al delito, por eso no sólo el sicariato vino para quedarse, sino lamentablemente toda forma de crimen. Extraño que no haya aparecido ya un asesino serial. Ya una vez tuvimos uno, " el hombre del sombrero negro", un muy conocido portero de una discoteca super popular de Santo Domingo, que antes había trabajado en la Universidad Pedro Henriquez Ureña.El era amigo de todos los que estuvieron por ese Centro educativo, y los que frecuentaban la famosa discoteca, y fue una sorpresa que el " buena gente " fornido caballero, se destapara en la prensa como la persona que se ocupaba por las inmediaciones del puente Juan Pablo a violar y matar mujeres cubriendo su cabeza con un sombrero lo que le llevo al sobre nombre de " el hombre del sombrero negro". Hace ya más de veinte años lo atraparon, fue condenado por los hechos y murió de una enfermedad en la cárcel.
Cuando un ser humano es asesinado, no importa quién sea es algo sumamente lamentable, pero cuando el crimen se perpetra a un alto ejecutivo de una empresa de las más importantes del país, y además este es extranjero, causa muchísimo pesar el hecho por múltiples razones. Se vuelve a evidenciar la poca seguridad en la que vivimos, y se crea mala prensa a nivel internacional, que aleja no solo al turismo, sino también hasta la inversión extranjera. Por eso hay que investigar con sumo cuidado los hechos en que se suscitó este lamentable crimen. No para justificarlo, un acto así jamas es justificable, pero si para aclarar cada detalle por el que fue ejecutado.
Dicen que el ingeniero mexicano fue apuñalado sin mediar palabras por un hombre de 30 a 35 años de edad. Si no hay por medio señales de que iba a haber robo. Si no hay razones para un acto de sicariato, quizás también habría que estudiar el hecho como el de un acto de un asesino serial que quizás comience a actuar por esas zonas oscuras del parque. Ojala que no sea así. Esto seria lo que nos faltase donde ya tenemos demasiado, con todo lo que vemos a diario en todos los sentidos desde hace ya mucho tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario