Hay un libro llamado "Dictators' Dinner: A Bad Taste Guide to Entertaining Tyrants", (Cenas de los dictadores: Una guía del mal gusto de entretener a los tiranos) escrito por Victoria Clark y Melissa Scott. El ejemplar fue publicado en 2014.
Bueno, el libro muestra una investigación sobre los hábitos alimenticios que tenían dictadores como Adolf Hitler y Joseph Stalin. Las autoras descubrieron interesantes detalles sobre las recetas predilectas de éstos.
Joseph Stalin
joseph Stalin
Este personaje se caracterizaba por hacer grandes banquetes para muchas personas. Sin embargo, no todo era fiesta o diversión. Según las autoras, Joseph Stalin utilizaba estos grandes banquetes, los cuales podrían durar hasta seis horas, para extender y asegurar su poder dentro del Partido Comunista.
El dictador planeaba intensos juegos con bebidas alcohólicas y mucha comida para que sus invitados perdiesen el control de sus actos, o hasta el conocimiento, y así convencerlos de hacer cosas que en realidad no querían.
Comida rusa
De acuerdo al libro, el menú preferido de Stalin tenía: nueces, ajo, ciruelas y granadas, alimentos típicos de la cocina georgiana (de Georgia, donde nació Stalin).
Adolf Hitler
Según el libro, Hitler no era ciento por ciento vegetariano, como muchos creíamos. De hecho, se encontraron registros históricos de solicitudes culinarias del dictador que incluían diferentes tipos de aves, considerando sus interiores.
Hitler, tenía mucho miedo de que lo envenenaran, por lo que le pedía a 15 auxiliares que probaran su comida antes que él, y después de 45 minutos de esa prueba, él comía.
Pavo Relleno
La chef británica, Dione Lucas, recuerda haber servido a Adolf Hitler muchas veces en el Hotel Hamburgo en la década de 1930 y asegura que uno de sus platos preferidos era el pavo relleno (stuffed squab, en la cocina inglesa).
Benito Mussolini también tenía gustos bastante particulares. De hecho, uno de sus platos preferidos era el ajo picado frito con aceite de oliva y limón. Era tanto la adicción a ese plato, que se podía comer un plato lleno. ¿Te imaginas comer un plato entero de ajo frito? Inimaginable.
Ajo frito
Su esposa, Rachele, una vez confesó que cuando él pedía su platillo preferido, ella no soportaba su olor durante la noche y debía dormir en otra habitación. Lo más curioso es que Mussolini odiaba la pasta, la pizza y las papas, porque le causaban mucho dolor de cabeza, pero no tenía problema en comer un plato entero de ajo frito en aceite. ¡Qué extraño!
Estos datos son bastante curiosos, y te permiten saber más de los personajes que han marcado a la historia mundial. Si te gustó, y crees que le interesaría a un amigo tuyo, ¡no dudes en compartirlo!
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