Jose Nacher
Casi un centenar de escoltas han sido retirados y solo cinco afortunados y el Coronel Nivaldo Pérez Guerra han podido ser redistribuidos. Esta es la otra cara de la moneda de la muerte de Fidel Castro , que empuja a antiguos escoltas del exdirigente a poner su punto de mira en la seguridad privada.
"Están agilizando la jubilación, que no es lo mismo ni se escribe igual. Nos citan a Seguridad Personal, allá en Jaimanitas, nos presentan el retiro y como compensación a toda una vida de lealtades, nos entregan un automóvil chino que parece nuevo, modelo CK de la marca Geely, pero que en realidad son cacharros descontinuados", denunció uno de los antiguos escoltas de Castro.
Con este escenario a muchos de estos guardias solo les queda emprender el camino de la seguridad privada para seguir ganándose la vida.
Es la solución para todos aquellos integrantes de la Seguridad Personal que han quedado como "personal a reubicar" tras el fallecimiento del exmandatario cubano.
El objetivo pasaría por constituir una cooperativa privada destinada a ofrecer servicios de protección a celebridades y famosos.
Se trata de un nuevo capítulo de la particular relación de Fidel Castro con sus escoltas. No hay que olvidar que Juan Reinaldo Sánchez, escolta de Castro durante 17 años, ya llegó a denunciar la vida de lujo del expresidente.
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