Embajadas e intereses estadounidenses en todo el mundo toman “medidas prudentes”
EL PAÍS Washington 9 DIC 2014 - 03:53 CET2
Estados Unidos quiere evitar que la publicación prevista para este martes del informe sobre torturas de la CIA ponga en peligro sus instalaciones y personal en todo el mundo. Desde antes de la esperada revelación de las partes no clasificadas del informe, embajadas y otros intereses del país en territorio extranjero adoptaron lo que la Casa Blanca calificó como medidas “prudentes” para mejorar su seguridad.
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“Hay algunos indicios de que la publicación del informe podría provocar un mayor riesgo a instalaciones e individuos estadounidenses en todo el mundo”, reconoció el lunes el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest. Por ello, continuó, “el Gobierno ha dado pasos prudentes para garantizar que se aplican las precauciones de seguridad adecuadas”.
“Ciertamente, cabe la posibilidad de que la publicación del informe cause disturbios y, por ello, el Departamento de Defensa ha ordenado a los mandos de combate (regionales) que tomen las medidas de protección apropiadas”, señaló el portavoz militar Steve Warren.
Aunque el Pentágono no ha desvelado oficialmente qué tipo de medidas de precaución ha ordenado, la cadena CNN asegura que entre estas figura la puesta en alerta desde la semana pasada de hasta 2.000 marines actualmente concentrados en las bases estadounidenses de Morón, España, y Sigonella, en Italia. Estas fuerzas están ya listas para formar un “contingente de respuesta” en África en caso de disturbios, según adelantaron fuentes del Pentágono a la emisora.
También están en alerta otros 2.000 marines estacionados en Oriente Próximo y 2.200 más a bordo de varios buques de guerra en el mar Arábigo y en el Golfo de Adén. De igual manera, están listos para desplegarse para proteger embajadas estadounidenses bajo amenaza tres equipos de unos 50 marines cada uno desplegados actualmente en España, Bahréin y Japón, según CNN.
Sin embargo, más difícil que evitar disturbios será controlar la eventual reacción de aliados regionales clave de EE UU.
Según se conoció el viernes, el secretario de Estado, John Kerry, advirtió a la presidenta del Comité de Inteligencia del Senado que debe publicar el informe, la demócrata Dianne Feinstein, de las posibles “complicaciones” que el documento desclasificado podría provocar en asuntos ya de por sí delicados de la diplomacia estadounidense.
Según Reuters, entre esas preocupaciones estaría ver cómo afectan las revelaciones al apoyo de los aliados regionales en la lucha contra el Estado Islámico (EI) en Irak y Siria o la situación de los rehenes estadounidenses en manos de terroristas como Al Qaeda y el EI.
Con información de Marc Bassets, Yolanda Monge, Silvia Ayuso y Joan Faus.
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