Carmen Martínez-Bordiú declaraba hace unos meses que estaba dispuesta a reivindicar algunos de los títulos nobiliarios que le corresponderían como primogénita, una vez que se hizo público que su madre padecía un cáncer irreversible. Su respuesta fue clara al preguntarle la periodista Carmen Duerto si tenia intención de ceder el ducado de Franco con grandeza de España a su hermano Francis. La respuesta que dio en ese momento no dejaba lugar a dudas. Fue tajante: "¡No y no!".
Este ducado fue creado el 26 de noviembre de 1975 por el rey Juan Carlospara Carmen Franco en memoria de su padre. Efectivamente no tendría que hacer concesiones en este sentido ya que por derecho de nacimiento le correspondería no solo este título que deja la madre, sino también el marquesado de Villaverde que ostenta actualmente su hermano Francis Franco junto con el del señorío de Meirás. El primero lo heredó de su padre, Cristóbal Martínez-Bordiú, que murió en 1998.
En aquel momento aún no se había aprobado la ley sobre la igualdad del hombre y de la mujer en la sucesión de títulos nobiliarios. El 30 de octubre del 2006 se suprimió la preferencia del varón y fue entonces cuando muchas primogénitas de la nobleza decidieron ejercer sus derechos. Carmen no lo hizo porque en esos años habría supuesto un disgusto importante para la madre el entablar un conflicto con su hermano Francis, que nunca se ha caracterizado por ser hombre componedor.
En este sentido habría que recordar el enfrentamiento que tuvo hace años en la estación del AVE de Zaragoza al saltarse el cordón de seguridad y actualmente los seis años que solicita la Fiscalía por la imputación de tres delitos por conducción temeraria, atentado contra la autoridad y daños.
Carmen, siempre ajena a los títulos
El asunto quedó en tablas y aunque se dijo que la matriarca del clan organizó una reunión para dirimir estas cuestiones de cesión de marquesado por parte de Francis a su hermana a cambio del ducado de Franco, nunca lo confirmaron los protagonistas.
Entre otras cosas porque para Carmen los títulos no han sido fundamentales en su vida. Cambió el ducado de Cádiz por el de señora de Rossi cuando se marchó con el anticuario Jean Marie, padre de su hija Cynthia. Ahora es distinto porque sería renunciar a un derecho que también le correspondería a su heredero, Luis Alfonso de Borbón, y con el tiempo, a su nieta Eugenia.
¿Qué pasa con el señorío de Meirás?
En cuanto al señorío de Meirás, es el único al que Carmen no podría acceder. Este título lo concedió el rey don Juan Carlos y con carácter personal a Carmen Polo al enviudar y desaparecía a su muerte. Lo curioso del caso es que Francis Franco lo reclamó y nadie de su familia incluida su madre se opuso. Contra todo pronóstico, el jefe del Estado firmó un decreto por el que el nieto mayor (que no primogénito) se convertía en el titular de esta concesión nobiliaria.
El señorío no lo heredará el hijo de Francis Franco (que se llama como él) a no ser que el Rey titular actual hiciera lo mismo. Una decisión que no se identifica con la manera de funcionar de don Felipe. Con lo cual no hay necesidad por parte de Carmen Martínez-Bordiú de entrar en un conflicto de intereses que no lleva a ninguna parte.
En cambio, no hay duda que la primogénita no a va a ceder en lo que se refiere a negociar nada que tenga que ver con el ducado de Franco. Desde el 29 de diciembre de 2017 se encuentra vacante a la espera de la publicación de la correspondiente notificación en el Boletín Oficial del Estado.
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