Reforma policial…(¡Qué risa!)

Por Ramón Colombo. 10 de julio de 2015 - 12:08 am -  

En síntesis, es cuestión de invertir el orden de los factores y civilizarla (literalmente).

Ramón Colombo

Soy periodista con licenciatura, maestría y doctorado en unos 17 periódicos de México y Santo Domingo, buen sonero e hijo adoptivo de Toña la Negra. He sido delivery de panadería y farmacia, panadero, vendedor de friquitaquis en el Quisqueya, peón de Obras Públicas, torturador especializado en recitar a Buesa, fabricante clandestino de crema envejeciente y vendedor de libros que nadie compró. Amo a las mujeres de Goya y Cezanne. Cuento granitos de arena sin acelerarme con los espejismos y guardo las vías de un ferrocarril imaginario que siempre está por partir. Soy un soñador incurable.

¡¡Por cuadragésima quinta vez desde 1961 se presenta la que nunca falta…la que en cada Gobierno se nos aparece…La que nunca camina: la Reforma Policial!! Y (¡otra vez!) a decir lo mismo, para que en las máximas alturas del Poder (donde está la solución) nadie haga caso: hay que erradicar para siempre (¡por favor!) la doctrina militar, netamente trujillista, con todo su generalato y coronelaje de ridículas charreteras doradas, para hacer un organismo que tiene que ser, todo, primero preventivo; segundo investigativo y, tercero, represivo. En síntesis, es cuestión de invertir el orden de los factores y civilizarla (literalmente).

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